El viaje por carretera es un clásico de las vacaciones. En España no tenemos esos kilómetros y kilómetros de vacío —y moteles— de los que presumen las road movies americanas: vivimos más apretados, así que vas a tropezarte con un nuevo pueblo cada dos por tres. Pero nuestras carreteras son tan dignas de ser recorridas como cualquier otras. Lamentablemente, con los precios de la gasolina, este no es el año idóneo para lanzarse a conocer la diversidad paisajística y cultural española desde el asfalto. Así que, para que no te quedes con las ganas, aquí van 7 road movies españolas de ayer y hoy que nos muestran distintas formas de viajar por nuestras carreteras.
1. En caravana: Diecisiete (Daniel Sánchez Arévalo, 2019)
Un roadtrip en autocaravana suena tan idílico como caro, pero los hermanos que protagonizan Diecisiete ni van de vacaciones ni tienen un duro. Héctor se escapa del centro de menores mes y medio antes de cumplir su internamiento para buscar al perro con el que ha estado haciendo terapia. Cuando Ismael lo encuentra en la residencia de su abuela, Héctor convence a su hermano mayor de que lo acompañe en su búsqueda. Y, ya que van a echarse a la carretera, se llevan a la anciana con ellos para que pueda morir en su pueblo. La aventura, como cabe esperar, los hará mejores como personas y como hermanos. El humor, la ternura y la inteligencia que destila hacen de esta aparentemente sencilla feel good movie una obra memorable que se agarra al corazón.
2. En el coche familiar: Vámonos, Bárbara (Cecilia Bartolomé, 1978)
En plena Transición y oponiéndose a su familia burguesa, Ana abandona a su frío e infiel marido y se va de vacaciones en coche con su hija Bárbara. A lo largo del trayecto, Ana, aferrándose a su nueva libertad, intenta definir quién es ella fuera de su infeliz matrimonio, a la vez que renueva y afianza la relación con su hija. Llena de humor, cotidianidad y frescura, esta road movie fue una cinta aún demasiado moderna para una España que, también en proceso de cambio, queda hábilmente retratada y cuestionada.
3. En un despampanante descapotable: Los años bárbaros (Fernando Colomo, 1998)
La de Jaime y Tomás, universitarios integrantes de la resistencia antifranquista en los 40, es una escapada en el sentido literal de la palabra. Condenados a 8 años de prisión por una pintada en la Universidad, huyen del Valle de los Caídos en un descapotable con dos chicas norteamericanas que han planeado el rescate desde Francia. Fingiendo ser señoritos que acompañan a unas turistas, intentan llegar hasta la frontera sin que los descubran, con el jefe del sindicato de estudiantes fascistas en los talones. Es un viaje a vida o muerte, pero la cinta no olvida que son jóvenes, que tienen ganas de divertirse, de comer bien, de enamorarse y de despedirse de España antes de los largos años de exilio.
4. A dedo: Vivir es fácil con los ojos cerrados (David Trueba, 2013)
Es 1966 y John Lennon está en Almería rodando una película. Así que Antonio, un profesor positivo e idealista que enseña inglés con canciones de los Beatles, viaja desde Albacete para conocer a su ídolo y consultar con él algunas dudas sobre sus letras. Por el camino se topa con dos autoestopistas a los que recoge encantado: Belén, una joven que huye de un centro en el que había sido recluida para ocultar su embarazo, y Juanjo, un adolescente que se ha fugado de casa tras una discusión con su padre. Su viaje compartido, que llena de esperanza, excentricidad y ternura el desértico paisaje almeriense, es una luminosa rebelión en una España demasiado gris.
5. En tractor: El Rayo (Fran Araújo y Ernesto de Nova, 2013)
El viaje de Hassan en El Rayo es uno de esos viajes incansables en los que no importa cuántos obstáculos haya que salvar, cuánto tiempo tarde o cuánto sacrificio conlleve, que no va a dar media vuelta. No se puede dar por vencido, porque su viaje es una vuelta a casa. Su Odisea es llegar desde España, donde lleva 13 años trabajando, hasta Marruecos, conduciendo un tractor que es a la vez su precario medio de transporte y una valiosa herramienta de trabajo para su familia. El documental, rodado con muy pocos medios, incorpora algo de ficción, pero retrata de forma honesta esta historia de dignidad, supervivencia y tesón.
6. En BlaBlaCar: Con quién viajas (Martín Cuervo, 2021)
Hacer autostop ya no se lleva, pero seguimos compartiendo coche con desconocidos, solo que ahora dividimos los gastos. A pesar de que podamos guiarnos por las valoraciones de las apps para elegir compañero de viaje, nada te asegura del todo que la persona que va a llevarte a Murcia tenga buenas y transparentes intenciones. Con quién viajas, sin apenas salir del coche, construye una comedia con aires de thriller en torno a la desconfianza e incomodidad entre cuatro desconocidos que comparten camino.
7. En moto: El puente (Juan Antonio Bardem, 1977)
En la primera película de Juan Antonio Bardem tras la dictadura, Alfredo Landa recupera, para desmontarlo, el papel que el cine del destape le había asignado. Encarna a Juan, un mecánico cafre y egoísta que, tras ser plantado por su cita, se va de puente a lomos de su “Poderosa” con el único propósito de ligar con tantas mujeres como pueda. Pero la moto lo lleva ante diferentes situaciones que lo enfrentan a una realidad a la que nunca antes le había prestado atención y que le empuja a tomar partido de una vez. Sin renunciar al humor, asistimos durante el viaje al proceso de politización de Juan, que empieza a ser consciente del compromiso social y sindical que su época exige de él.
Añado «Thelma y Louise»
👏👏👏👏