El 26 de diciembre vimos el final de Insecure (Issa Rae y Larry Wilmore, 2016-2021), una serie que arrancaba haciendo muchas preguntas. Después de cinco temporadas, ¿ha conseguido responder alguna?
El nicho de seriéfilos a los que nos gustan los capítulos de media hora sobre grupos de amigos veinteañeros que se buscan las castañas como buenamente pueden vivimos horas trágicas. El final de 2021 nos hizo despedirnos de Issa y de Insecure, la serie que debes ver con el Shazam siempre abierto.
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Aunque a simple vista parezca algo para un público muy concreto, la realidad es que Insecure es una serie que toca todos los palos; y habla de temas tan universales como la salud mental, la brecha salarial, microrracismos, gentrificación y, cómo no, los problemas de la vida en pareja. Su influencia se puede ver en otras series de HBO como Podría destruirte (Michaela Coel, 2020) e incluso ha llegado a algunas series patrias como Vida perfecta (Leticia Dolera, 2019-).
En el piloto conocemos a Issa el día de su 29 cumpleaños. Le queda solo un año para los temidos 30 y tiene dudas acerca de su carrera profesional, su novio Lawrence y el rumbo apático que está tomando su vida. Issa se acerca a esa edad donde se supone que tienes que tener toda la vida descifrada, pero ella sigue navegando en un mar de preguntas sin ninguna respuesta.
«¿Cómo de distinta sería mi vida si de verdad persiguiese lo que quiero?».
Issa (1x01: Insecure as Fuck)
Maleta grande para el viaje a ninguna parte
Issa y Lawrence llevan cinco años juntos cuando empieza la serie
Ese 30 cumpleaños llega al final de la tercera temporada, aunque Issa sigue estando bastante lejos de la versión idealizada de la vida adulta que tenemos muchos. A lo largo de la serie lo único constante que hay son los malabares que los personajes tienen que hacer para mantener su vida a flote. Cuando el trabajo va bien, lo que va mal son las amistades, y cuando todo parece que está en orden es cuando llega la vida sentimental a darte un revés.
La historia de Issa es la de ir remando vendavales, y la de salir de un triángulo amoroso para meterse en uno todavía más complicado, pero poco a poco vemos cómo se convierte en una versión mejor de sí misma. Por lo tanto, ¿cuándo va la Issa real a alcanzar a esa Issa con la que ella misma fantasea?
«Solo quiero llegar ya a la parte de mi vida en la que todo está bien».
Issa (5x10: Everything Gonna Be, Okay?!)
Issa y su mayor enemiga, su yo al otro lado del espejo
No es tan fácil como hacer un flashforward y descubrir que Issa y sus amigas han conseguido todo lo que se proponían. La esencia de Insecure es ver cómo la vida no para de hacerle putadas a sus protagonistas. Es importante que el último capítulo sea fiel a lo que hemos visto a lo largo de cinco temporadas, pero al mismo tiempo tiene que darnos un final feliz.
Parece apropiado que la serie vuelva en su último capítulo a lo que nos enseñó en el piloto: el vértigo de seguir cumpliendo años. Ese salto temporal que pide Issa cuando está en su momento más bajo se le concede, pero haciendo varios altos en el camino. Las protagonistas ya pasan de los 30 y la vida no se simplifica, al contrario, con el paso de los años todo se vuelve más difícil. Descubren que en el viaje a ninguna parte lo realmente importante es con quién compartes el trayecto.
En cierto modo es afianzador saber que los 30 no son ningún punto de inflexión ni ningún umbral a la adultez, solo es un número redondo por el que inevitablemente hay que pasar. La Issa imaginaria se burlaba de la Issa real porque su vida era un desastre, pero lo que la persona al otro lado del espejo no sabe es que si eres un desastre, no hay ningún sitio al que puedas ir salvo hacia arriba.
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Molly, Tiffany y Kelli, las compañeras de viaje de Issa
Puedes ver Insecure en HBO Max.