Antonio de la Torre es uno de los actores más prolíficos y queridos del panorama español actual. Tiene el récord de nominaciones en los premios Goya (¡ha estado nominado 14 veces!). Solo se ha llevado a casa 2 estatuillas: una por AzulOscuroCasiNegro (Daniel Sánchez Arévalo, 2006) y otra por El reino (Rodrigo Sorogoyen, 2018). Si cada año se bromea con que la Academia debería crear un Goya a Mejor Antonio de la Torre es porque siempre tiene un buen papel que merece una nominación. Una de sus grandes virtudes es su versatilidad a la hora de afrontar personajes de distintas naturalezas. Nos ha hecho reír y sufrir, ha conseguido darnos miedo, ternura e incluso asco. Por eso, hoy repasamos sus distintas facetas a lo largo de su carrera a modo de homenaje.
La primera
Antonio de la Torre en Te doy mis ojos
Antes de protagonizar grandes películas y estar donde apuntan los focos, el actor malagueño asumió pequeños papeles en cintas muy populares. Era uno de los hombres que hacían terapia con Luis Tosar en Te doy mis ojos (Icíar Bollain, 2003), el dependiente de los grandes almacenes de El día de la bestia (Álex de la Iglesia, 1995), un trabajador en el hotel de Hola, ¿estás sola? (Icíar Bollaín, 1995). Él mismo reconoció en una entrevista para 20 minutos (a modo de agradecimiento) que en los inicios de su carrera fueron mujeres las que le auparon: Icíar Bollaín, Chus Gutiérrez y Ángeles González-Sinde.
La de la comedia
Antonio de la Torre en La gran familia española. (Fuente: Atípica Films)
Hay muchos buenos actores a los que la comedia no se les da demasiado bien, pero no es el caso de Antonio de la Torre. Demostró su implicación con su oficio ganando 33 kilos para protagonizar Gordos (Daniel Sánchez Arévalo, 2009), en la que interpretaba a un hombre obeso marcado por su pasado vendiendo pastillas para adelgazar. Pero su aventura con Sánchez Arévalo no terminó ahí. Después de participar también en la aclamada Primos (2011) como el entrañable Bachi, interpretó al hermano triste de La gran familia española (2013), una comedia en la que demostró una vez más el buen dúo que hace con Roberto Álamo. Aunque sus últimas interpretaciones han sido más en thrillers y dramas, Antonio de la Torre no abandona la comedia y en 2019 estrenó El plan (Polo Menárguez, 2019), una comedia negra con un trasfondo dramático y crítico con la realidad social y laboral del país.
La de la violencia
Antonio de la Torre en Tarde para la ira (Fuente: La Canica Films)
Aunque consigue sacarnos una carcajada, Antonio de la Torre puede sacar su vena violenta y transmitir todo lo contrario a los papeles de los que veníamos hablando. Ha bordado también papeles de tipo al que no te quieres cruzar por la calle. Cuando Antonio de la Torre asume un papel de personaje violento, da la sensación de que es una bomba que va a explotar en cualquier momento. Su papel en Volver (Pedro Almodóvar, 2006) nos hizo sentir realmente incómodos, y nos creímos a ese padre y marido depravado al que le pasa lo que se merece que le pase. También nos creímos al policía arrogante de Grupo 7 y temimos al payaso torturador de Balada triste de trompeta (Álex de la Iglesia, 2010). Pero fue en Tarde para la ira (Raúl Arévalo, 2016) en la que se llevó toda esa dureza a un ejercicio de contención, demostrando toda la violencia que puede caber en una mirada.
«La violencia no tiene justificación, pero explicación sí que la tiene»
Antonio de la Torre en una entrevista para El País
La política
Antonio de la Torre y Luis Zahera en El reino
De Antonio de la Torre son conocidas sus intervenciones en medios y en redes sociales con mensajes en los que se moja sobre la realidad política española. El actor se posiciona en la vida real y por eso no sorprende que haya elegido, también, papeles en películas y series con contenido político. Encarnó a Pepe Mújica, presidente uruguayo, en La noche de los 12 años (Álvaro Brechner, 2018). También a Melitón Manzanas, policía asesinado por ETA, en La línea invisible (Mariano Barroso, 2020). Fue muy popular su papel como Higinio, el topo que vivió 30 años encerrado en un hueco en la pared para evitar las represalias franquistas en La trinchera infinita (Aitor Arregi, Jon Garaño, Jose Mari Goenaga, 2019). Pero fue su interpretación en El reino (Rodrigo Sorogoyen, 2018) la que nos hizo fácil ponerle cara al político corrupto español, y que le llevó a ganar el Goya a mejor actor protagonista.
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Estas son cuatro facetas de las muchas que el actor ha cultivado durante su carrera. También ha hecho mucha televisión y ha prestado su voz en documentales como Palabras para un fin del mundo (Manuel Menchón, 2020) o Madrid, interior (Juan Cavestany, 2020). Lo que está claro es que ha puesto cuerpo, cara y alma a muchos tipos de personalidad distintas, porque si hay algo que domina Antonio de la Torre es el arte de ser otras personas.
¿Dónde puedes ver estas películas?
AzulOscuroCasiNegro (FlixOle), El día de la bestia (FlixOle), Gordos (FlixOle), Hola, ¿estás sola? (Netflix), Grupo 7 (Prime Video), La gran familia española (Netflix), La isla mínima (Netflix), La línea invisible (Movistar+), La trinchera infinita (Netflix), Palabras para un fin del mundo (Filmin), Primos (Prime Video), Te doy mis ojos (FlixOle) Volver (Netflix).
Buena descripción de Antonio de la Torre.
Gracias.